REFLEXION
Amanece y tu despiertas ,la pesadilla nocturna ha quedado atrás y te relaja saber que todo fue una pesadilla provocada por el exceso de comida, alcohol, estrés, u otras causas.
Pero esta pesadilla nunca termina para algún animal silvestre que son extraídos de su hábitat, llevados a lugares clandestinos, mercadeado en carreteras, mercados, veterinarias por individuos sin escrúpulos. Esta es la suerte que corren tortugas, chocoyos, tucanes, garrobos, y otros animales exóticos.
Algunos animales llamados “domésticos” por su adaptación y convivencia con los humanos, son maltratados, vilipendiados por sus “dueños” quienes no les dan el cuido debido, muchos perros terminan vagabundeando en las calles, donde también son golpeados, igual les toca a gatos, y a caballos que utilizan carretoneros, los ultrajan brutalmente, los obligan a llevar cargas que exceden su capacidad, es ahí cuando inicia el tormento sus dueños los golpean hasta a la inconciencia de ambos. Creo que el hecho de que este animal se convierta en su instrumento para ganarse al pan diario, debiese ser suficiente motivo para darle un trato digno al animal. Ahí radica un tanto la estupidez humana.
Son las generaciones actuales y venideras (esto no es un discursillo trillado, o al menos de cada uno de nosotros depende que no lo sea) que tenemos que cambiar estas prácticas que desdicen de nuestra condición humana, niegan eso que muchos dicen que nos diferencia de los animales, razón, conciencia, libre albedrío,"ser pensante".
Es de sobra conocido que muchos animales han ayudado a muchas personas a superar traumas, accidentes tales como los delfines, terapia con caballos, a personas no videntes perros los guían por las calles, los llevan a sus casas, los han salvados de muchos accidentes. Existen muchos historias de las maravillosas cosas que los animales han hecho y hacen para alegría de la humanidad.
Hasta en los grandes espectáculos en los circos, que a muchos han hecho reír, tras el escenario ellos son maltratados y humillados para poder ser amaestrados, sin embargo ellos (animales) nos han sacado más de una sonrisa.
El modelo de mercado nos ha dejado muy claro que los valores como la solidaridad, honestidad, en pro del bien común, no están en sus entrañas que tanto oprimen a los habitantes del planeta, en este episodio que vive la humanidad, tan degradado los seres vivos-animales no escapan ante esta realidad egoísta y depredadora del entorno (flora, fauna y demás seres indefinibles o desconocidos).
Otro país es posible, otro mundo es posible. La marcha ha empezado.Nuevos principios han de guiarnos.
Hace poco caminaba por una calle próxima a un mercado, de repente en una acera, una joven vendía dos palomas dentro de una jaula, al parecer en ese mismo lugar también ofrecían ropa, me acerque, no con intención de preguntar el precio si no para ver los ojos de estos dos seres vivientes e intentar imaginarme que sentían. Me quede ensimismado viéndoles y sentí sus ojos acusadores.
Luchemos por un trato Digno para los animales.
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